Hablando el jueves en una conferencia de prensa en GinebraTedros dijo que en alrededor del 25 por ciento de los países, algunas instalaciones de salud han tenido que cerrar por completo debido a los recortes, según cifras de más de 100 países compilados por OMS.
Interrupciones severas
Los pagos de bolsillo para los servicios de salud han llevado a interrupciones en el suministro de medicamentos y otros productos de salud, así como al aumento de la pérdida de empleos en el sector de la salud.
Como resultado, «los países están revisando los presupuestos, reduciendo los costos y el fortalecimiento de la recaudación de fondos y las asociaciones», dijo el jefe de la Agencia de Salud de la ONU.
De la dependencia de la ayuda a la autosuficiencia
Teniendo que revisar los presupuestos, reducir los costos y fortalecer las asociaciones y la recaudación de fondos, algunos países dependen del apoyo de quién es la transición de la dependencia de la ayuda hacia la autosuficiencia sostenible.
«Ahora estamos apoyando a los países para acelerar esa transición.«, Dijo Tedros, citando ejemplos de países como Sudáfrica y Kenia, que están trabajando con éxito para evitar los impactos en la salud de los recortes repentinos y no planificados.
Recomendaciones de la OMS
Tedros proporcionó a los países varias recomendaciones sobre formas de mitigar los recortes de fondos:
- Las poblaciones más pobres del mundo necesitan priorizar limitando su exposición al gasto de bolsillo
- Resistir reducciones en el gasto de salud pública y proteger los presupuestos de salud
- Fondos de donantes de canales a través de presupuestos nacionales, en lugar de sistemas de donación paralelos
- Evite reducir los servicios o las instalaciones de cierre, y absorber la mayor cantidad de impacto posible a través de ganancias de eficiencia en el sistema de salud
Nuevas fuentes de ingresos
A través de herramientas a corto y largo plazo, que también alienta a los países a generar nuevas fuentes de ingresos.
Las medidas inmediatas, como la introducción o el aumento de los impuestos sobre los productos que dañan la salud pública, es otra herramienta efectiva para mantener el gasto en salud, agregó.
Países como Colombia y Gambia, que en los últimos años han introducido tales impuestos, han visto aumentar los ingresos y la caída del consumo, dijo Tedros.
A largo plazo, la OMS aboga por las pólizas de seguro de salud sociales y comunitarias, donde las personas o las familias pueden contribuir con una pequeña cantidad a un fondo que aumenta el financiamiento del servicio de salud.
Aunque no todas las medidas serán adecuadas para cada país, que «trabaje con los países afectados para identificar qué medidas son las mejores para ellos y para adaptar esas medidas en consecuencia».