Comunicado de www.vaticannews.va —
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, anunció que el ejército está ocupando grandes áreas de la Franja de Gaza, incorporándolas a zonas de amortiguación deshabitadas. Mientras tanto, en Jerusalén continúan las protestas ciudadanas contra el primer ministro Netanyahu.
Gianmarco Murroni – Ciudad del Vaticano
Si se llega a un acuerdo sobre los rehenes, la ofensiva en la Franja de Gaza cesará inmediatamente. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, hizo la declaración durante una visita al eje Morag, creado recientemente por Israel para separar las ciudades sureñas de Khan Younis y Rafah. Katz añadió que «grandes franjas de territorio están siendo ocupadas e incorporadas a las zonas de seguridad israelíes, reduciendo Gaza y aislándola aún más». Mientras tanto, concluyó el ministro israelí, «el ejército se está preparando para un gran movimiento para derrotar a Hamás, que incluye la movilización de un gran número de reservistas».
Emergencia humanitaria
La reanudación de la ofensiva israelí en la Franja ha exacerbado la crisis humanitaria en la región. El cierre por parte de Israel de los cruces de Kerem Shalom y Al-Awja, impidiendo el ingreso de ayuda humanitaria a Gaza, entró hoy en su 40º día consecutivo. El cruce de Rafah, del lado palestino, lleva 23 días consecutivos cerrado, impidiendo el paso de heridos y enfermos al lado egipcio. Así lo informan fuentes egipcias, según las cuales el gobierno de El Cairo ha aumentado la alerta en la frontera y cerca del cruce debido a los bombardeos de Israel. El traslado de heridos desde Gaza fue suspendido tras la llegada de 1.705 pacientes, distribuidos en 45 grupos, acompañados por 2.500 familiares. Actualmente, los heridos y enfermos están siendo tratados principalmente en hospitales del norte del Sinaí.
Llamamiento de Hamás
Hamás, por su parte, ha dejado claro que rechaza los intentos de Israel de controlar la distribución de la ayuda humanitaria en Gaza, ya sea por parte de soldados del ejército israelí o de empresas privadas controladas por el gobierno. Para el grupo palestino, la propuesta del Estado israelí viola el derecho internacional, oponiéndose a los «principios fundamentales de la ayuda humanitaria: neutralidad, imparcialidad, independencia y humanidad». Controlar la entrada de ayuda al enclave «perpetúa una realidad de control político y chantaje», añadió Hamás, pidiendo «al mundo entero que garantice que la ayuda humanitaria llegue al pueblo palestino de forma segura y respetuosa».
Protestas contra Netanyahu
Mientras tanto, en Jerusalén, una pequeña protesta cerca de la residencia del primer ministro israelí, Netanyahu, terminó con la detención, en un ambiente tenso, de siete manifestantes. Varias decenas de personas se unieron a la protesta y, además de los arrestos, la policía confiscó varios carteles que pedían el fin de la ofensiva israelí en Gaza e invitaban a los israelíes a rechazar el servicio militar en las FDI. Vídeos publicados en las redes sociales mostraban a manifestantes sosteniendo pancartas que decían «Detengan la masacre».
Se publicó primero como Israel detendrá su ofensiva contra Gaza si se llega a un acuerdo sobre rehenes
